Debido a la reciente epidemia de Covid-19, muchas personas han comenzado a prestar más atención a su sistema inmunológico y a la salud en general. Aunque las vitaminas no son una cura para el propio virus, está científicamente demostrado su eficacia para fortalecer el sistema inmune, que puede ser una medida de seguridad importante durante una pandemia.
Es esencial entender que el sistema inmune es un gran complejo de órganos, células sanguíneas, proteínas y productos químicos que trabajan juntos para proteger el cuerpo de bacterias, virus, hongos y otros agresores externos. Aunque cada sistema inmunológico es diferente, hay algunos hábitos y factores que ayudan a todos a mejorarlo. Además de hábitos saludables como dejar de fumar y beber, dormir lo suficiente y trabajar al aire libre, es importante nutrir tu cuerpo de vitaminas y otros nutrientes importantes. Esto es posible cuando consumimos una variedad de frutas frescas, verduras y otros alimentos saludables.
¿Cuáles son las vitaminas que han demostrado ser eficaces para fortalecer el sistema inmune?
En primer lugar, la conocida vitamina C de la que oímos hablar desde la infancia. Es conocida por prevenir infecciones y reducir su duración, además de combatir el resfriado, esta vitamina aumenta la actividad antioxidante, ayuda a la absorción de otros nutrientes, en particular hierro, disminuye el riesgo de enfermedades crónicas comunes y mejora algunas condiciones neurológicas.
La vitamina C reduce la inflamación porque actúa como antioxidante. La inflamación pulmonar es uno de los síntomas más grandes de Covid-19, ya que conduce a complicaciones graves como dificultad respiratoria e incluso la muerte. Por eso es muy importante tomar suficiente vitamina C mientras estás sano.
Los alimentos más ricos en vitamina C son los pimientos, guava, kiwi, fresas, brócoli y papaya. Por eso es importante mantener un registro de la necesidad de vitaminas. A menudo se prescribe como un suplemento médico, sin embargo, la vitamina C es un producto esencial y fácil de encontrar.
En segundo lugar, la vitamina D desempeña un papel vital en la protección contra diferentes enfermedades. Es esencial para la producción y el crecimiento de células inmunes importantes, la forma activa de esta vitamina ayuda a regular las proteínas antimicrobianas, así como el control de calcio y fosfato en el cuerpo, por eso es tan importante para la salud de los huesos. La vitamina D es conocida como vitamina solar porque podemos obtenerla del sol mientras estamos afuera.
Durante el verano y los meses de sol, nuestro cuerpo puede producir suficiente vitamina D si hemos pasado tiempo al aire libre, sin embargo, entre octubre y marzo es importante ayudar al cuerpo a obtener esta vitamina. Una de las mejores fuentes es el pescado graso, como el salmón, el arenque, la caballa y las sardinas. Buenas fuentes alternativas son también carne roja, hígado, yemas de huevo, hongos y cereales para el desayuno fortificado.
La vitamina A es otro elemento importante para combatir enfermedades. También apoya la función y la salud de las células en las barreras importantes para nuestro sistema inmunológico, incluyendo la piel, las vías respiratorias y el tracto gastrointestinal. Esta vitamina también es esencial para los linfocitos que están involucrados en la respuesta de anticuerpos a los atacantes externos. Se ha demostrado que la vitamina A ayuda a construir la tolerancia inmune, que es esencial para una buena salud.
Esta vitamina está disponible en 2 formas: preformados y carotenoides. La vitamina A preformada se encuentra en alimentos animales como pescado, carne y productos lácteos. El atún es una gran fuente de esta forma de vitamina A. Si eliges carotenoides, elige alimentos de colores, como zanahorias, patatas dulces, calabaza, melón y verduras de hoja oscura.
Además de mantener la piel y los ojos sanos, la vitamina E también fortalece el sistema inmune mediante la mejora de las defensas naturales contra enfermedades e infecciones. Por lo general, comer una variedad de alimentos en tu vida diaria es suficiente para mantener niveles óptimos de esta vitamina. Este potente antioxidante se puede encontrar en las semillas, espinacas y nueces.
El grupo de vitaminas B es muy importante para una respuesta inmune sana, especialmente las vitaminas B6, B9 (también conocida como ácido fólico) y B12. Una deficiencia de vitamina B6 se asocia con una disminución de la producción de anticuerpos y otras funciones que debilitan el sistema inmunológico. Una deficiencia de vitaminas B9 y B12 puede alterar considerablemente el sistema inmunológico. Es importante tener en cuenta que la vitamina B12 sólo se encuentra en los productos animales, por lo que es importante utilizar suplementos si se sigue una dieta vegetariana o vegana.
La vitamina B6 se encuentra en carnes, pescado, cacahuetes, soja, plátanos, avena y una variedad de otros alimentos. Una gran fuente de B9 son varias verduras y frutas, como verduras de hoja verde oscuro, frijoles, cacahuetes, semillas de girasol y zumos de frutas frescos. Como ya se ha dicho, la vitamina B12 se encuentra en los productos animales, como la carne, el pescado, los productos lácteos, los huevos y algunos cereales fortificados.
Es importante tener en cuenta que casi todas las vitaminas pueden obtenerse a través de una dieta variada que contiene muchas frutas y verduras frescas. Sin embargo, cada vez más personas observan que sus análisis muestran carencias de nutrientes que pueden evitarse fácilmente.
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